Ulmus minor. Un nuevo reto...

Adquirí este "ulmus minor" en un intercambio de árboles con un amigo de afición por medio de Portal Bonsai. La verdad es que el árbol es un cúmulo de inperfecciones y defectos. También es verdad que el amor es ciego, y quizás lo que sentí por este olmo la primera vez que lo vi fue eso, un amor a primera vista. Pero pensándolo bien, algo tendria que tener este árbol para que a mi me llegara a "enamorar".
Bueno, dejemos el romanticismo a un lado y pasemos a ver las virtudes y defectos de este ejemplar.
Esta foto es de este verano, los primeros dias del olmo en mi jardín. Aqui se puede observar el potente y extraño arranque que tiene el árbol, quizás lo que mas me gustó de este árbol. Me transmite mucha fuerza y naturalidad, ese nebari lleno de huecos me sugiere formar un árbol con apariencia de vejez.
En contra del olmo, salta a la vista, su conicidad invertida. A partir de la primera rama de la derecha el tronco empieza a engordar.

                                                                                          

En la foto de la derecha se puede apreciar mejor el detalle de la conicidad invertida. Creo que haciendo un shari a partir de la primera rama e intentado ahuecar intentando de imitar los huecos de la base del árbol el defecto puede desaparecer o disimularse bastante, todo es cuestión de tiempo. Por otro lado, un punto a favor del olmo es su bonita corteza oscura y comenzando a agrietarse.

El nebari tampoco está exento ni de puntos a favor ni en contra. Estas oquedades invitan a meditar sobre el futuro de este árbol y si realmente merece la pena emplearse a fondo con él. Como punto negativo la brecha que tiene en la parte baja izuierda, me imagino que fué un golpe al intentar sacarlo del campo.

Una foto de la parte trasera del olmo, se puede apreciar la bonita corteza.

El árbol con la ramificación desnuda. Aqui se pueden apreciar todos sus defectos y virtudes. ¿Creeis que merece la pena trabajar este árbol? Yo sinceramente tengo mucha fe en él, y sobre todo muchas ganas de trabajarlo.
Como apunte personal quiero decir que a veces nos dejamos llevar por las opiniones de unos u otros compañeros de afición sin contar con lo que a nosotros en realidad nos dicen o trasmiten nuestros bonsais. Es muy importante tener cierto criterio para valorar si un árbol es merecedor o no de nuestro trabajo y dedicación, pero pienso que lo importante en realidad es creer en un objetivo e intentar alcanzarlo, siempre trabajando con ilusión y con motivación. Con  buenas dosis de ello es muy probable que nuestro amigo nos devuelva con creces todo el esfuerzo realizado. Yo de momento voy a currarme este "perejil", me apetece, me motiva y quizás algún dia surga el árbol que yo tengo en mente. Será cuestión de tiempo. Espero vuestra ayuda...